En el sector de Boyanco, entre las comunas de Angol y Ercilla, el jefe regional escuchó a más de 40 pequeños agricultores que ha  resultado con sus casas, siembras y bosques quemados.

Hasta el sector de Boyanco, ubicado entre las comunas de Angol y Ercilla, se trasladó este sábado el intendente de La Araucanía, Andrés Jouannet, para sostener una reunión de trabajo con parceleros que han sido afectados por diversos hechos de violencia rural.

Durante las más de dos horas de conversación, el jefe regional pudo conocer en terreno los problemas que afectan a los vecinos, que van desde la seguridad de sus predios hasta la falta de agua potable rural, el arreglo de caminos y poder contar con maquinaria agrícola.

En la oportunidad el intendente Jouannet se comprometió a trabajar para dar soluciones a las múltiples demandas de los habitantes del sector y de las comunas vecinas, sobre todo considerando que se trata de una zona deprimida debido a la persistente ocurrencia de delitos rurales.

“Hay temas bien graves que ellos nos han planteado: el tema del agua es uno, que es una cuestión permanente en toda la Región; el tema de la cosecha es otro, ellos dicen que no tienen maquinarias para cosechar; y por otra parte está el tema de la seguridad, que ha sido un tema muy duro en este sector: a ellos les han quemado las casas, les han quemado siembras, les han quemado bosques y por eso nosotros estamos aquí como gobierno, dando la cara”, dijo el intendente.

En ese sentido, el jefe regional adelantó que son varias la iniciativas que comenzarán a ser trabajadas para entregar una respuesta a las peticiones de los vecinos, las que van desde arreglar los caminos que están en mal estado,  analizar la factibilidad de dotar de agua potable a los hogares, así como el fortalecimiento de las juntas de vigilancia existentes en el sector. “Tenemos varios proyectos que vamos a sacar con ellos, fundamentalmente para organizarnos, trabajar con las juntas de vigilancia, trabajar el tema del agua y todos los demás”, dijo el intendente.

Por su parte, el agricultor y presidente de la Junta de Vigilancia Rural, Joel Ovalle, afirmó que era la primera vez que un intendente llegaba hasta el sector, para conversar en terreno con los vecinos. “Primera vez que viene un intendente, le agradezco. Conversé con él y me dijo que iba a venir, y hoy vimos que vino, nos escuchó atentamente y también se llevó los planteamientos que nosotros le pusimos sobre la mesa y también él acotó plazos para empezar a dar las soluciones”, dijo el dirigente

Ovalle agregó que en la actualidad lo que más urge a los vecinos es poder adquirir un pool de maquinaria agrícola para poder desarrollar de mejor forma las faenas propias del campo, ya que el clima de inseguridad ha producido que los prestadores de servicios no quieran operar en esos apartados parajes de La Araucanía. “Nuestros problemas son de equipamiento agrícola, que no se puede seguir produciendo la tierra, puesto que aquí nadie quiere venir a hacer los trabajos, y ya tenemos el compromiso que desde el lunes en adelante vamos a comenzar a trabajar para tener un equipo de maquinaria agrícola”, afirmó.